martes, 28 de febrero de 2012

Lo que hacen las novias

Cortometraje español dirigido por Jota Linares que compitió hace un año en la sexta edición del Short Shorts Film Festival México, en la sección iberoamericana.

lunes, 27 de febrero de 2012

Los lunes

Me caen mal las parejas que se tratan entre sí como idiotas, pero eso se sabe. Y sus celebraciones a la esclavitud y ese darse las manos, los labios, las desconfianzas, para decir eres mío de nadie más. Desde aquí, cotizo más alto mi soledad del día a día; me sirvo café a las seis, a las diez  y a la una. Miro el plasma del monitor inevitablemente inundarse de tu nombre y aparece muchas veces y repetido como si fuera un rugido de peces burbujeantes. Las sonrisas de lunes se reparten, miro a las oficinistas maquillarse las pestañas; hacerse papiroflexia el deseo. No te pronuncio. No hay por qué. La lengua es esa suela con la que salgo a caminar de zapatos desgastados.

sábado, 18 de febrero de 2012

Primera pulsión


Hoy conocí a mi sobrino, sentí necesidad ineludible de retratarlo con  mi hermana; la foto corresponde al primer disparo. Es muy raro el tiempo,  este niño cumple hoy un mes de vida  aunque se pronosticaba que nacería dentro de diez días.

jueves, 16 de febrero de 2012

Una mañana de invierno

¿Que si le extraño?


                                                                  Con el alma.

miércoles, 15 de febrero de 2012

martes, 7 de febrero de 2012

Honrando los días

De lo perdido lo que aparezca, singularmente no tengo nada que escribir ni hermosas imágenes digitales, las violetas que recién puse en el ventanal amanecieron quebradas de frío. Es que no puede ser. Recibimos envíos del cerro, tamales verdes  que prepara la viejita de Don Sabino. A estas fechas más de ochocientos huichos se fueron al peritaje y nunca en la historia fueron tantos. El invierno en la sierra avanza, explora nuestros confines, las decepciones, los rencores. El abuelo fuego da aviso a sus hijos que mucho tendrán que esperar para dar abrazo a sus mujeres. Una serpiente hambrienta camina devorando la memoria, ahí estaba el único cargo de cargar con uno y a lo mucho cargar con la oportunidad de ser felices pero nada. Y marchamos -otra vez- porque no fuimos a Catorce. Yo no sé si los destinos se vayan a encontrar, me hermané con la flaqueza, te devuelvo tus amables saludos republicanos, tus soldaditos de plástico, tus intermitencias, porque dicen que la sangre lastima sin poderlo remediar.