martes, 29 de noviembre de 2016

Paradoja

Mis huellas de abandono son enormes, al menos esa fantasía habita mi cabeza desde hace 28 años. Cada que una persona sale de mi vida, en particular los hombres, aunque también me ha pasado con un par de amigas, la paso mal. 

Acostumbraba pasarla peor, ese sentimiento de ser "abandonada" una y otra vez este año me tumbó en un diván para psicoanalizarme. Hasta entonces, antes de pedir ayuda profesional por segunda ocasión en mi vida, solía recargarme muchísimo en mis novios y conocidos. 

Supongo que fui la típica persona a quien le preguntabas "¿cómo estás?" y en automático respondía todos los males de este mundo. Con los años perdí capacidad de tomar decisiones por mi propia cuenta, todo era revisado por mis mejores amigas, todo era motivo de rush, todo me lastimaba, etc. 

Así llegué a terapia, cuando sentí que suficientes personas me habían mandado a la verga por esta actitud que cuento (no hard feelings). El nuevo proceder me ha salido bastante caro, recién tuve un distanciamiento con una compañera muy importante, y apenas hace dos meses tuve un pleito fuerte con otra gran amiga. En resumidas cuentas, este proceso me ha exigido romperme un poco y despedirme de una manera que no comprendo de personas muy amadas. 

El punto es, me gustaría aclarar, que tales pleitos y otros desencuentros que sumar a la lista pero que quedarán fuera de este post, me han dejado el corazón igual de roto y llorando como niño perdido, aunque ya no diga nada, aunque haya aprendido (o haga el intento) por irme sin azotar las puertas, bajito como que nada pasa y que todo estará bien, como siempre.




sábado, 26 de noviembre de 2016

Aquarius

Les voy a contar del día que casi me suelto aplaudiendo al terminar una película, por primera vez en treinta años. Aquarius (Kleber Mendoça Filho, 2016) es el tipo de película en la que me gustaría vivir, me hizo sentir implicada y puso enfrente varias consideraciones sobre lo que mi juicio implica crecer sin miedo. En primer lugar me parece un film que toma como temas prioritarios la imaginación, el cuerpo y el espacio de las mujeres. Metáfora hogar/ cuerpo. Metáfora de “una parte del cuerpo que falta como simbolismo de la pareja que ha muerto”(1), o misma falta que ocasiona el surgimiento de un deseo, si fuese el caso de visualizar este concepto implicado en la teoría lacaniana. Se trata de una película que visualiza a las mujeres ya sea en grupo o inmersas en un universo autónomo y dignamente solitario. Representa los efectos de arraigarse, hacer territorio y delimitar una identidad resuelta en lo familiar y afectivo. Propone al auto-cuidado como statement donde la imaginación y la música ocupan lugares privilegiados. Es una película de mujeres que acceden a su vida sexual sin importar su edad, y sobre este tema fui muy feliz de ver que el director recrea el lenguaje de la adultez, o mal llamada tercera edad, en un contexto (profundamente patriarcal) donde las mujeres son confinadas como objetos sexuales perecederos antes de cumplir veintitantos años, incluso menos. “Los hombres no figuran en la toma de decisiones de las mujeres en la narrativa de este film” (2), y este valor cinematográfico nos ha parecido más que sensato y más que bello.




1. Comentario de E. Discutir esta película con él fue delicioso.
2. Ídem

miércoles, 16 de noviembre de 2016

..


Este amor
es un lienzo
en blanco

para escribir
amor

para pensarte
amor

y contradecirnos
y tocarnos
en otoño

mientras llueve